lunes, 25 de septiembre de 2023

 Cada verano se nos plantea la misma situación: el comienzo de un nuevo ciclo. El Estoicismo y el propio Nietzschen así lo expresaba: la quema periódica de lo viejo y el resurgimiento de lo nuevo, que todos los acontecimientos del mundo, todas las situaciones pasadas, presentes y futuras se repetirán eternamente.


EL ETERNO RETORNO

 

¿Acaso no ardió el último verano?

no esperó el fuego fatuo a la hojarasca

que tiñe de ocres la verde vereda

en que encontré tu sonrisa de niña.

 

¿Acaso sucumbió tu pelo en cano?

otrora azabache y trenza de yesca

para prender ansias de cuerpo y seda

estrenando noches de vuelo y vida

 

¿Acaso ya murieron los arcanos?

baraja en pánico sobre tu mesa,

sobre el ahorcado rueda la rueda

el azar ya no marca la partida

 

¿Acaso acabado y muerto hoy comienza?

el Fenix que renace de su cresa

retornando al verde aquella vereda

en que perdí tu sonrisa de niña.

 

¿Acaso es cierto el eterno retorno?

finito el argumento, igual que el tiempo,

fugaz existencia y fugaz verano,

todo ardió, vereda sin hojarasca

que siempre vuelve a renacer de nuevo.


sábado, 16 de septiembre de 2023

 Algunas relaciones pueden volverse tóxicas, quizás todas en algún momento lo sean. Creemos hacernos inmunes a esa toxicidad hasta que ya no podemos escapar de su veneno…


Ahora

 

Ahora que tú dices conocerme,

poniendo tu penumbra entre mis labios,

formando mis conceptos con tus pieles,

cual actriz invitada a mi teatro.

 

Ahora que dominas los desiertos

de las dunas que forman mis silencios,

diriges la intención de mi mirada

a la tersura ignota de otros cuerpos.

 

Ahora que desbrozas el barbecho

al que dejé crecer en mis secretos,

hurtando la cosecha que dejaste

o comiendo a hurtadillas de mi huerto.

 

Ahora que te tatuaste en mi frente

y no soy nadie sin decir tu nombre,

—sin dioses a quien rezar ni rogar—

con el torso de par en par abierto.

 

Ahora puedes hurgar en mi pecho

y estrangular, si quieres, mis arterias

o exprimir como fruta mi cerebro,

entregado, como estoy, a tu concierto.

 

Ahora pedí la vez en la huida

por dejarte el paso libre y expedito,

para que así tus pájaros volaran

desde la cárcel gris de tus recuerdos.

 

Yo que fui gavilán, allí encerrado,

me quedé sin fuerzas en el empeño.

Ahora que mi tiempo ya ha llegado,

permanezco dormido entre tus pechos.

domingo, 10 de septiembre de 2023

 El pasado 28 de mayo, mes de las flores —no podía ser de otra manera— se nos marchó un andaluz universal, aunque hubiese nacido en Ciudad Real. Si él hubiera escrito su propio epitafio hubiera dicho: “no os molestéis, conozco la salida”, pues en sus propias palabras decía: “No me sorprende la muerte”.

D. Antonio Gala siempre fue, y sigue siendo, una referencia para mi y mi obra, una fuente inagotable, de filosofía y cultura, a donde acudo a beber en búsqueda de su líquida inspiración.

Valga el videopoema de este fin de semana como humilde homenaje de este aprendiz de poeta.

(Click sobre imagen o enlace para ver videopoema)




GALA

 

Ahora ya tendrás la voz serena,

sin ansiedades incumplidas

sin el gesto amargo,

sin pleamares que mojen la arena

ni labios que susurren a tu herida.

 

Ya no corre la sangre por tus venas

antes por siempre concurridas,

corazón amargo

ni salivas unánimes de penas

ni las manos que apresen una brida,

 

No debiera morir quien no supiera,

quien no copa la ausencia en su almohada,

esperando a la Parca con lo puesto

 

Aquel que cruza irónico la acera

de Laguna Estigia, urbana y asfaltada,

andando ya, su mente, entre los muertos.


sábado, 2 de septiembre de 2023

 Dime, ¿por qué dejaste este vacío?

Pocas cosas causan más dolor emocional, que disfrutar de las mieles del amor o del deseo, para después perderlo sin saber porqué.

DIME


Dime si en tus manos tibias

se duermen palomas blancas,

o si sobre tu frente, ahora plata,

siguen jugando los niños de arena,

si todavía en tu horizonte

siguen arribando soles y estrellas.


Dime si es amargo el deleite

de buscar mis huellas entre los labios

de un ignoto último beso,

labios que son barrera ardiente

y alimento de este cansancio amargo,

en el que me escudo por no buscarte,

en el que me pierdo por no encontrarte,

hasta que descubro que es imposible.


Dime si cuesta tanto abandonarse,

dejar las palmas abiertas de tus manos 

para que por ellas vaguen mis dedos

como pétalos de una vieja flor,

o abrir el abismo de tus oídos

para dejar caer por sus laderas

la soledad fingida de un susurro:

torso de la última frase de amor.


Dime si nada de esto es cierto,

y, entonces, dime porqué por mi alcoba

sigue impregnado tu aroma

o la toalla está húmeda de tu pelo

o la taza guarda el calor del último café,

o porqué entre mis brazos

sigue quedando el vacío de tu cuerpo...


 He creado este villancico, en forma de villanelle, para desearos una feliz Navidad y un año nuevo lleno de paz y prosperidad. (Click sobre ...